En un suspiro mis pulmones se contraen con un solo impulso de aire tomado en un circulo de agotamiento y de temor, mezclado con aquellas ansias que consumen el cuerpo, ese frágil que con un soplo suave se desliza por el espacio y por el tiempo aquél que nos vuelve presos de la rutina interplanetaria y que nos vuelve entes, seres o individuos que pasan como una alegoría utópica de lo que queremos ser ...
Ahí esta todo, en observar y penetrar en aquel vacío oscuro lleno de materia viva donde solo uno esta vivo y sale del cuerpo a escuchar voces y rodear con el espíritu el silencio el cual te da libertad de experimentar lo que haz querido siempre...
Te despiertas y escuchas un atardecer, el alma y la luna, escuchas el silencio que ha alimentado tu alma como un apeirón...
Sueles preguntarte en ese momento quién eres y qué eres, si materia o espíritu, si sangre, carne y huesos o hay mas dentro de ti...
Escuchando aquel silencio parsimonioso hecho para ti no para los demás, eres tu y solo tu el que estas allí, son voces ¡si! , las escuchas pero trata de oír el silencio brindado por los dioses del infinito universo donde tu eres solamente una mota entre millones y millares de utopías vivientes...
Y termina ese suspiro inicial y vuelves a tu cuerpo con paz
Mientras tus pulmones se expanden soltando el aire en un minuto que saliste de aquella cárcel de carne y huesos y disfrutaste escuchar el silencio .
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